Con
la obra Prometeo Olvidado, Laura Yusem y Clara Pando
El
Titán Prometeo roba el fuegoa los dioses y se lo entrega
a los hombres. Como castigo Zeus, titánico señor del
Olimpo, ordena encadenarlo a una roca en un lugar solitario y apartado.
Hefesto y sus acólitos son los encargados del procedimiento.
Un Coro de Oceánides, hijas de Océano, llega al lugar
del suplicio para lamentarse con él.
Prometeo relata al Coro los beneficios que la humanidad ha recibido
junto con el fuego. En primer lugar las esperanzas ciegas y, además,
la capacidad de construir casas, carros y barcos, de distinguir
la alternancia de las estaciones y el día de la noche, de
extraer minerales de la tierra , de curar enfermedades e interpretar
los sueños y de conocer el movimiento de los astros, el número
y las letras.Océano, enviado de Zeus, lo visita pero fracasa
en su intento de lograr una tregua ya que el titán que no
declina su orgullosa actitud ni se arrepiente de su acto.
En su enloquecida carrera por la tierra, bajo la apariencia de una
vaca y perseguida por un tábano, irrumpe la joven doncella
mortal, castigada también por haber sido objeto de deseo
de Zeus. Prometeo, conocedor del futuro, le revela el itinerario
que deberá seguir y le anticipa que de su progenie, y luego
de varias generaciones, nacerá su propio salvador . Por último
se presenta Hermes, quien intenta obtener del Titán el nombre
de aquél que destronará a Zeus. Prometeo se niega
a dar la información. El dios-mensajero parte, pero antes
le anuncia un nuevo tormento: se hundirá en la roca, tras
un largo período reaparecerá y un águila devorará
su hígado perpetuamente renovado.
Así, con el inicio de un terremoto en el que se precipitan
Prometeo y el Coro, culmina la tragedia.
Y mucho, mucho tiempo después, en otro lugar, comienza Prometeo
olvidado...
En:
Patio de Actores - Lerma 568 - TE: 4 772-9732
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