Dear friend, The violence between Israelis and Palestinians is spinning out of control. It threatens to kill thousands in Israel and the occupied territories, and to engulf the entire region in war. Hundreds of Palestinian and Israeli civilians are already dead. In the words of President Bush, enough is enough. It's time to end this deadly stalemate and forge a lasting peace. Please join us and many Jewish and Palestinian groups in calling on the Bush Administration to lead the world community and play a strong role in the conflict until a permanent peace agreement has been reached. Just go to: http://www.moveon.org/enoughisenough/ Prominent members of both sides agree that only a political solution will bring peace, but without the intervention of the world community, everything indicates that the violence will continue to escalate. Regional war is also a real possibility: already, the Israeli army has come under shell fire from the Hezbollah in Lebanon, and Egypt has suspended contact with Israel. As Israel's strongest supporter and as a champion of the Palestinian state, the United States may be the only country that can step in and stop the bloodshed for good. The Bush Administration is torn on how deeply to engage on this issue. It's good news that US Secretary of State Colin Powell will travel to Israel and work to secure a peace agreement. And the US has supported a UN Security Council resolution on this issue, which is unprecedented. But the Administration is likely to come under heavy fire from both sides for taking this stance, and it lacks a firm policy for the region. President Bush needs to hear that people around the world support continued US involvement until a lasting peace has been achieved. You can let him know at: http://www.moveon.org/enoughisenough/ Every day, this situation grows more dire. Please act now for a peaceful Middle East. Sincerely, --Eli Pariser 9-11Peace Campaign MoveOn.org April 8, 2002 PS: For more information on the Middle East and peacekeeping efforts there, and for a list of Jewish and Palestinian groups that support increased US involvement, go to the link above and click on "Middle East." US Secretary of State Colin Powell: "No matter how many tanks go through how many villages, at the end of this process you will still have suicide bombers. Ultimately, the Israeli Defense Forces will . . . have to leave the occupied territories . . . and we'll be right back to the need for a political process." (As quoted in the Washington Post, 2/4/02) ____________ This is a message from MoveOn.org If you wish to remove yourself from this list, please visit our subscription management page at http://www.moveon.org/subscrip/i.html?id=496-668142-kXP%2FAaZ1h8sdNf4r1xy0Qg -opiniones del mundo: http://www.pagina12.com.ar/2001/01-10/01-10-15/pag24.htm periodico de San Carlos de Bariloche, 12 al 19 de Octubre 2001,de acuerdo al informe suministrado por la Asociación Ambientalista Lihue: "Las bases serían 4 y se instalarían en las Provincias de Salta, Entre Rios, Chubut y Tierra del Fuego. Ademas del acuerdo con el FMI,incluiría el compromiso del Gobierno argentino de integrar a nuestro pais del ALCA. Diarios:"Diario Provincia" 23,Tierra de Fuego, 27/8/01, Clarín "Inatalarían una base para detectar ensayos nucleares":17/8/01.-Diario Página 12. Sobre movimientos combinados en Salta:,"Cabañas 2000" en el diario "El Tribuno", Salta 23/08/01. De Gualeyguachu,"El Argentino" 22/08/01, Diario "El Parana" 23/08/01 y "El Heraldo",Concordia, 23/08/01 Sobre "El Plan Colombia" que elabora EEUU,para combatir la guerrilla, allí busca acrecentar su presencia en América Latina. Ver publicación para Argentina del mes de Septiembre diario "El Monde Diplomatique" de Francia. ....ES EN ESTE ASPECTO, MAS ALLA DE LAS DECLARACIONES DIPLOMATICAS, DONDE ARGENTINA PRESTARA UNA COLABORACION ACTIVA, PUES EL GOBIERNO MANTIENE EL OFRECIMIENTO DE MISIONES DE PAZ EN DISTINTAS PARTES DEL MUNDO, ASI COMO EL ENVIO DE AYUDA HUMANITARIA A LOS REFUGIADOS AFGANOS.(26noticias) Los aviones abrieron fuego contra la localidad de Zikar, al sur de Bagdad, "donde alcanzaron posiciones civiles causando daños materiales", explicó el portavoz, que no reveló si se habían registrado víctimas. "Nuestras baterías de antiaéreos respondieron al enemigo y lo obligaron a regresar a sus bases en Kuwait y Arabia Saudí", añadió el portavoz. Desde que libraran la guerra del Golfo de 1991, aviones de combate de Estados Unidos y el Reino Unido patrullan a diario, y atacan en ocasiones, posiciones iraquíes en el norte y el sur del país, con el objetivo declarado de proteger minorías kurdas y chiítas que viven en "zonas de exclusión aérea". ........Según testigos, comerciantes cristianos armados con armas, cuchillos y arcos y flechas se enfrentaron a los manifestantes, tratando de defender sus negocios. La población de más de 110 millones de Nigeria está dividida entre cristianos y musulmanes. La introducción de la ley islámica sharia en los estados del norte del país ha desatado enfrentamientos entre ambos grupos religiosos en algunas ciudades de la región. Hawks
try to implicate Iraq by hunting for evidence in UK A row has broken out in
the Bush administration after it was revealed that hawks in the Pentagon had
sent an ex-CIA director, James Woolsey, to Britain, behind the backs of the
state department and the current CIA leadership. News of Mr Woolsey's travels,
have exposed a deep fissure inside the administration over whether to extend
the war against terrorism to Iraq. Last month, the state department, led by
Colin Powell, convinced President Bush that there was no clear involvement in
the attacks and that Iraq should not be included on the target list as such
action might destroy the fragile coalition. However, hawks in the administration
grouped around the deputy defence secretary, Paul Wolfowitz, are determined
to ensure military action to topple Saddam Hussein. According to several sources
in the U.S., Mr Wolfowitz paid for Mr Woolsey to travel to Britain last month
to look for evidence of prior Iraqi involvement in terrorism. Mr Woolsey is
convinced that Iraq has orchestrated terrorist attacks on U.S. interests in
recent years. The state department and the CIA are furious at Mr Woolsey's freelance
sleuthing and Mr Wolfowitz's role. "This is against their own political agenda
to bomb Iraq," said one U.S. source with close links to intelligence. A British
official said on Friday that the police and British intelligence were "bemused"
by Mr Woolsey's activities and had been unsure of U.S. government awareness
about the matter. According to the Knight Ridder news agency, the former CIA
director was looking for evidence that a convicted terrorist known as Ramzi
Youssef was an Iraqi agent. According to the prosecution in his trial, Ramzi
Youssef was called Abdul Basit, who had studied in Swansea in the 1980s. Mr
Woolsey believes that Basit was abducted by Iraqi intelligence and an agent
took over his identity. Mr Woolsey has refused to comment on his trips to the
U.K. However, he suggested that he was constructing a legal case against Iraq.
The White House has left the door open to military action against Baghdad, should
conclusive evidence of Saddam's involvement emerge. -COPYRIGHT: GUARDIAN NEWS
SERVICE (Down) Annan era el favorito para el premio de este año. Los otros nominados eran: el ex embajador norteamericano en la ONU, Richard Holbrooke; Li Hingzhi, el fundador de la secta china Falun Gong y Fidel Castro, presidente de Cuba. Cuando Annan fue elegido en forma inédita para un segundo mandato consecutivo de cinco años como secretario general, Holbrooke, declaró: “Él se convirtió en la estrella de rock de la diplomacia internacional y tiene, como nadie, la mejor chance de reformar la ONU y hacerla una organización mejor”. Annan fue electo secretario general en 1997 después de la presión norteamericana para impedir que su antecesor, el egipcio Butros Butros-Ghali, continuara por otros cinco años. Annan ha sido elogiado por lograr que se tome mayor conciencia sobre la pobreza y el abuso de los derechos humanos, por combatir la epidemia del sida y por elevar la larga disputa con Estados Unidos para que cancele sus deudas con la ONU. Pero su intento de negociar con Saddam Hussein y sus fracasos en Sierra Leona le hicieron ganar pocos amigos. La ONU tuvo buenos resultados en sus gestiones en Timor Oriental y Kosovo pero ha fracasado en Ruanda, Sierra Leona y Somalía. Los sobrevivientes del genocidio en Ruanda, en 1994, y, un año más tarde, la masacre de hombres y niños musulmanes en Bosnia perjudicaron la imagen de Annan. “Él tiene una fuerte responsabilidad en el genocidio de Ruanda. Es una lástima y un hecho desafortunado; él no debería haber ganado el Premio Nobel”, declaró Antoine Mugesera, presidente de la asociación de sobrevivientes Ibuka. Este año la ONU ha tenido otras disputas con Estados Unidos: los norteamericanos se negaron a enviar su secretario de Estado a la Conferencia contra el Racismo organizada por la ONU y, a cambio, mandaron una delegación de bajo nivel como signo de desaprobación del lenguaje antiisraelí del encuentro. Estados Unidos también se enojó cuando perdió su lugar en la omisión de Derechos Humanos del organismo. * De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12. Traducción: Verónica Gago. Mc Donald's y la bacteria (microbio) E.COLI -posible virus? (Virus cybernético) Virus? orgánico contra los Medios de comunicacion (informática) (de El Nuevo Herald) Es real el peligro de terrorismo cibernético KETTY RODRIGUEZ El Nuevo Herald Las posibilidades de un ataque terrorista en el espacio cibernético que pueda alterar y colapsar sistemas vitales del país, como las telecomunicaciones, el transporte, las finanzas y los servicios, no son un peligro virtual, sino real, admitió el gobierno de Estados Unidos. Un golpe de este tipo se basaría en la ``vulnerabilidad'' de la internet y en la ausencia de un buen sistema de seguridad que proteja las redes de computación del país, dijo ayer Sherwood Boehlert, presidente del Comité de Ciencias de la Cámara de Representantes. ``Necesitamos personas que hagan cosas más creativas sobre la seguridad de las computadoras'', declaró Boehlert en una audiencia, durante la cual expertos del sector solicitaron incluir la seguridad de los sistemas computarizados en el plan de defensa nacional contra el terrorismo. Utilizando ejemplos hipotéticos, varios especialistas crearon imágenes caóticas basadas en la posibilidad de un ataque cibernético. ``¿Qué tal si los atacantes hubiesen afectado el sistema de comunicaciones y hubieran obstaculizado los esfuerzos de rescate, y si hubiesen intervenido en el monitoreo del suministro de agua de Manhattan?'', se preguntó Terry Benzel, vicepresidenta de la firma Network Associates Inc., con sede en California, que se encarga del diseño de programas de seguridad para redes y computadoras. Especialistas de la Universidad de Miami (UM) dijeron a El Nuevo Herald que, lamentablemente, no se había prestado atención a las cosas negativas que se pueden hacer con el uso de la tecnología y las computadoras. ``Necesitamos personal entrenado que vigile las redes en su forma física y virtual, y eso cuesta millones de dólares'', dijo Lewis Temares, decano del Colegio de Ingeniería de la UM. ``Tenemos que pagar un precio para aumentar los niveles de seguridad en nuestra sociedad''. Michael Scordilis, profesor de Ingeniería de la Computación de la UM, reconoció que la seguridad se ha quedado detrás del desarrollo tecnológico de los equipos y las redes de computación. Explicó que, con el uso de la internet, la situación es aún más delicada. ``Cualquiera puede entrar a la red, robar la identidad de una organización y hacer cosas terribles'', dijo Scordilis. Los instrumentos de que podrían disponer los terroristas son múltiples, de acuerdo con expertos. ``Bombas lógicas'' (sobresaturación de un sistema por el envío masivo de mensajes), virus, colapso en el servicio, podrían ser ahora las herramientas de un nuevo estilo de guerra. ``En vez de balas tienen bytes'', dice un estudio sobre ciberterrorismo realizado por el Centro para Estudios Internacionales y Estratégicos (CSIS), organización independiente de investigación con sede en Washington. Muchos de los que odian a Estados Unidos pueden convertirse en un ``Saddam Hussein y atacar a la nación tecnológicamente más vulnerable'', asegura el CSIS. El propio Osama bin Laden, principal sospechoso en los actos del 11 de septiembre, usa computadoras portátiles y envía mensajes con conexiones satelitales para contactar a miembros de su organización en otros países, recuerda el Centro. Cada año, el Pentágono es sometido a decenas de miles de ataques cibernéticos que son desviados y neutralizados. Sin embargo, especialistas de guerra del propio Pentágono aseguran que ``menos de 30 virtuosos en computación, estratégicamente ubicados alrededor del mundo y bien coordinados, y con un presupuesto de menos de $10 millones, pueden poner a Estados Unidos de rodillas'', según CSIS. Ganan Nobel por explicar porqué desconfiamos de vendedores de autos usados Akerlof 10 de octubre, 2001 Actualizado: 6:35 PM hora de Nueva York (2235 GMT) -------------------------------------------------------------------------------- En este artículo: El fin de las expectativas racionales -------------------------------------------------------------------------------- ESTOCOLMO (Reuters) -- Tres estadounidenses compartieron el premio Nobel de economía del año 2001 por explicar porqué muchos desconfían de vendedores de autos usados y porqué los gobiernos dudan de la veracidad de las declaraciones impositivas de los ciudadanos. La Real Academia de Ciencias sueca galardonó a los profesores de economía George Akerlof, Michael Spence y Jospeh Stiglitz por sus análisis de cómo funcionan los mercados cuando algunas personas saben más que otras, un concepto llamado "información asimétrica". El término significa, por ejemplo, que los administradores y directivos de una corporación saben más que los accionistas acerca del rendimiento de la empresa, de la misma manera que los prestatarios saben más que los acreedores acerca de las posibilidades de cancelación de la deuda. "Durante la década de 1970, los laureados de este año establecieron los fundamentos para una teoría general de mercados con información asimétrica", dijo la academia en su mención. Los aportes del trío "forman el núcleo de la información económica moderna" y han llevado a aplicaciones prácticas que van desde los mercados agrícolas a los mercados financieros modernos, dijo la academia. En esencia, dijo Anders Borglin, profesor de ciencias económicas de la Universidad de Lund en el sur de Suecia, el trabajo de los ganadores es la teoría que explica la desconfianza instintiva de mucha gente hacia un vendedor de autos usados, que habitualmente saben más que los compradores acerca de los vehículos. Spence "De la misma manera, los ciudadanos saben más acerca de sus finanzas privadas que las autoridades impositivas, esto es información asimétrica", dijo Borglin a Reuters. Akerlof, de 61 años, un profesor de economía de la Universidad de California en Berkeley, dijo que estaba "totalmente deleitado e increíblemente sorprendido" por la noticia, con la que lo despertaron. Spence, de 58 años, es un ex decano de las universidades de Harvard y Stanford, y Stiglitz es un profesor de economía, negocios y asuntos internacionales de la Universidad de Columbia. Spence dijo que se "deleitó" cuando alguien de la escuela de negocios de Stanford lo llamó para darle la noticia a las 4.00 de la madrugada mientras estaba de vacaciones en Hawai. "Fue una mezcla de alegría e incredulidad", dijo. "No lo esperaba, vino de la nada. Es un honor inmenso". Stiglitz saludó el reconocimiento por su trabajo en información económica que, aseguró, revolucionó el pensamiento acerca de cualquier mercado. "Obviamente estoy muy complacido por ello", dijo Stiglitz, un ex asesor de la Casa Blanca y ex economista jefe del Banco Mundial, en una entrevista telefónica. "Creo que el grupo de ideas que hemos elaborado sobre las imperfecciones de la información y las asimetrías de la información afectan profundamente cada aspecto de la economía de mercado, realmente han revolucionado el pensamiento acerca de virtualmente todo mercado, y probablemente los mercados de capitales más importantes", afirmó. El fin de las expectativas racionales Stiglitz George Perry, de la Institución Brookings en Washington, dijo que el gran aporte de Akerlof y sus colegas fue poner fin a la idea de que toda conducta económica estaba gobernada por expectativas racionales acerca del futuro. Mostraban, en cambio, que la información imperfecta afectaba las decisiones económicas. En lo que sus colegas han calificado de trabajo revolucionario, Akerlof demostró que la información asimétrica puede dar lugar a la así llamada selección adversa en los mercados. Un ejemplo práctico era cómo vendedores de autos usados de baja calidad podrían desplazar a los demás del mercado. Spence dio un paso más al demostrar cómo personas mejor informadas podrían trasmitir en forma creíble su conocimiento a aquellos menos informados para evitar algunos problemas asociados con la selección adversa. Su trabajo sobre las diferentes expectativas de los empleadores sobre diferentes grupos de trabajadores ayudó a explicar por qué los hombres y las personas de raza blanca ganaban más que las mujeres y las personas de piel negra con igual productividad. Stiglitz complementó los trabajos de Akerlof y Spence demostrando cómo las empresas de seguros pueden lidiar con los problemas resultantes de una falta de información detallada sobre el perfil de riesgo de los asegurados. Copyright 2001 Reuters Limited. Derechos Reservados. http://www.ucalgary.ca/~elsegal/TalmudMap/MG/MGTargumYerushalmi.html Targum Yerushalmi to the Torah: The title accurately designates the Palestinian provenance of this Aramaic version of the Torah (though "Jerusalemite" should not be taken literally, since the city of Jerusalem did not exist as a place of Jewith habitation at the time that this text was composed). In light of the discovery of many manuscripts containing similar works, it can be recognized that the Targum Yerushalmi that appears in the Mikra'ot Gedolot is but one representative of a larger family of Aramaic texts that are designated in the scholarly literature as "Fragmentary Targums." Dates Although the known manuscripts of these Targums are from the 11th-13th century, it appears that their contents originated hundreds of years earlier. Place Israel Description The "Targum Yerushalmi" does not provide a complete Aramaic translation of the Torah, but is confined to specific verses (or sometimes just individual phrases or words). There is no evidence that this Targum was intended to provide alternative readings for one of the complete Targum texts. ANTIGUO TESTAMENTO. Los judíos consideraban que existían dos cánones de los Libros Santos: el Canon Breve (palestinense) y el Canon Largo (alejandrino). El Antiguo Testamento en hebreo (Canon Breve) está formado por 39 libros y se divide en tres partes: " La Ley", "Los Profetas" y "Los Escritos". El Antiguo Testamento en griego (Canon Largo) está formado por 46 libros. La versión griega de la Biblia, conocida como de los Setenta, cuenta con 7 libros más: Tobías, Judith, Baruc, Eclesiástico, I y II de Macabeos y Sabiduría. Además, algunas secciones griegas de Ester y Daniel. Estos libros son conocidos frecuentemente, aunque la expresión no sea necesariamente la más adecuada, como "deutero-canónicos". Los judíos en Alejandría tenían un concepto más amplio de la inspiración bíblica. Estaban convencidos de que Dios no dejaba de comunicarse con su pueblo aún fuera de la Tierra Santa, y de que lo hacía iluminando a sus hijos en las nuevas circunstancias en que se encontraban. Los Apóstoles, al llevar el Evangelio al Imperio Grecorromano, utilizaron el Canon Alejandrino. Así, la Iglesia primitiva recibió este canon que consta de 46 libros. En el siglo III comenzaron las dudas sobre la inclusión de los así llamados "deuterocanónicos". La causa fueron las discusiones con los judíos, en las cuales los cristianos sólo utilizaban los libros proto-canónicos. Algunos Padres de la Iglesia hacen notar estas dudas en sus escritos —por ejemplo Atanasio (373), Cirilo de Jerusalén (386), Gregorio Nacianceno (389)—, mientras otros mantuvieron como inspirados también los deuterocanónicos —por ejemplo Basilio ( 379), Agustín (430), León Magno (461)—. A partir del año 393 diferentes concilios, primero regionales y luego ecuménicos, fueron precisando la lista de los Libros "canónicos" para la Iglesia. Estos fueron: * Concilio de Hipona (393) * Concilio de Cartago (397 y 419) * Concilio Florentino (1441) * Concilio de Trento (1546) En este último, solemnemente reunido el 8 de abril de 1546, se definió dogmáticamente el canon de los Libros Sagrados. Los protestantes sólo admiten como libros sagrados los 39 libros del canon hebreo. El primero que negó la canonicidad de los siete deuterocanónicos fue Carlostadio (1520), seguido de Lutero (1534) y luego Calvino (1540). The Quran on Human Embryonic Development: In the Holy Quran, God speaks about the stages of man’s embryonic development: We created man from an extract of clay. Then We made him as a drop in a place of settlement, firmly fixed. Then We made the drop into an alaqah (leech, suspended thing, and blood clot), then We made the alaqah into a mudghah (chewed substance)... 1 (Quran, 23:12-14) Literally, the Arabic word alaqah has three meanings: (1) leech, (2) suspended thing, and (3) blood clot. (down.com)
Government allows the use of two airports for military operations Coutresy The
STAR Government has decided to provide Pasni and Jacobabad air-bases to US and
the position taken by Pakistan is that these facilities will be restricted to
back-up support of US forces and no attack will be launched from these stations.
However, it is likely that these bases will be used for aerial support of US
forces when the US starts its second phase of assault against Afghanistan with
deployment of special ground forces. US ground forces have already gathered
in Uzbekistan and as soon as US-European air forces completely destroy Taliban's
defence line these forces will advance to launch an attack on Kabul, Kandahar
and Jalalabad. Sources said that American troops took over charge of Pasni airport
last Sunday when America launched its attack on Afghanistan. One C-130 aircraft
and five helicopters carrying American forces landed on that base which also
took over the air-control tower. However, till now US forces have not used these
facilities. Although, it is unclear whether the government would provide more
airbases to the US forces or not and how far it goes to support US attacks on
Afghanistan, but it is likely that Pakistan's military cooperation will be broader
when America starts its second phase of assaults. Since US started attacks on
Afghanistan, the Taliban have not been able to effectively retaliate against
US air strikes but on Wednesday, Taliban sources claimed that they will retaliate
and fire Scud missiles on US carriers in the Arabian Sea. Devora Neumark, FF Alumn, performance cancelled. Hello there, Last night with a great deal of difficulty the organizers in New York and in Montreal of the "Artists Gestures" project decided to cancel our event or postpone it, although it isn't clear that this second option will be viable. Therefore I will not be arriving in New York, although I am considering to go ahead with my durational performative piece here in Montreal, as an act of and symbol for my wanting to trust that creativity and creative solutions are possible if the will is present and the imagination stirred to non-violent resolution of injustices and imbalances of power, resources and "surity." I am fairly shaken by yesterday's events on the large social scale and on the impact on my own small life. Mostly, what frightens me above all is the seeming certainty on the part of military and political leadership that what is being done is just and the moral right. Take good care, Devora Este sitio está dedicado a la recreación de uno de los períodos más turbulentos en la historia de la humanidad, una época de misticismo, devoción y grandes ideales, pero en forma paralela encontramos ignorancia, ceguera, muerte, desolación y toda clase de odios injustificados e hipócritas. En todo caso, este episodio de las cruzadas ha seguido atrayendo el interés de las diversas generaciones desde el día en que el último de los guerreros de la cristiandad se embarcó para jamás volver a la Tierra Santa, en 1291. Interés que despierta lógicamente la trascendencia que este conflicto en nombre de la religión ha tenido para diversos pueblos de la tierra, en particular para nuestra civilización occidental. No nos cabe ninguna duda que el mundo no sería como lo es hoy si esta página de nuestro pasado jamás hubiera existido...........(?!!) Iran calls for "immediate end" to US strikes EHRAN: Iranian President Mohammad Khatami called Tuesday for an "immediate end" to the US military strikes against Iran's neighbour Afghanistan, state radio reported. Khatami said the strikes against Afghanistan's Taliban regime and its protege, terror suspect Osama bin Laden, had caused a "human catastrophe," the radio said. "An appropriate atmosphere was established for politicians after the attacks on the United States to fight and resist this ugly phenomenon" of terrorism, Khatami told a gathering of the nation's Friday prayers leaders. EL TRADUCTOR DE PAGINA/12 QUE VOLVIO A AFGANISTAN Los ojos de Fayaz camino a Kabul Por Eduardo Febbro Desde Peshawar Vamos a llamarlo Fayaz. A esta hora debe haber llegado a su destino. Se fue de Peshawar en plena noche porque no soportó ver las bombas caer sobre su tierra natal. Hacía demasiado tiempo que no tenía noticias de su familia y ayer decidió partir con destino a Kabul. En lugar de esta nota tendría que haber una entrevista con un gran líder religioso afgano opuesto a la dictadura religiosa de los talibanes. La entrevista fue hecha a la tarde con una traducción resumida y había que transcribirla completa del urdú al español. Fayaz es uno de los intérpretes de Página/12 y tendría que haber hecho su trabajo de traductor. Pero Fayaz se fue. Llegó a las diez de la noche al hotel y dijo: “Me tengo que ir ahora mismo”. Los afganos son gente de ojos profundos y luminosos. Ayer, Fayaz los tenía oscuros, envueltos en una tristeza que no le era común. “Me duele el alma, me duele mi país, me duele no saber dónde y cómo está mi familia. Tengo que partir, quiero ir a ver. Salgo ahora clandestinamente para Kabul.” Todo el drama del pueblo afgano estaba en los ojos de Fayaz. Más de 5 millones de refugiados, decenas de miles de hombres y mujeres viviendo en el margen, sin documentos ni permisos de residencia, llevando siempre a cuestas ese negro destino nacional, recordando el millón de muertos de la guerra, las invasiones, las sequías, los lugares de la infancia que no se pueden visitar, pagando todavía el precio de una guerra fría que se acabó hace mucho. Si alguien puede imaginarse a la Argentina con 6 millones de ausentes, pueblos devastados, indiferencia internacional, guerras tribales, pugnas de influencias entre los países fronterizos y las naciones de Occidente, hambre, millones y millones de personas sin rumbo ni futuro posible. Si alguien puede imaginarse una sociedad como ésa, así es Afganistán. Los ojos de Fayaz llevaban anoche todo ese interminable drama encima. “Ser afgano es caminar hacia un país que siempre se aleja”, comentaba otro refugiado. Es un país de destinos que cruzan fronteras: médicos que hicieron la guerra contra el Ejército Rojo y ahora trabajan como taxistas en Pakistán, ingenieros que construyen en Europa o EE.UU. los puentes que nunca levantarán en Afganistán. Fayaz se fue en busca de los suyos. Hoy no hay traducción. Negroponte: Internet is way to world peace November 25, 1997 Web posted at: 8:26 p.m. EST (0126 GMT) BRUSSELS, Belgium (Reuters) -- Tired of all the hype about the Internet? Well, think again -- one respected Internet guru says it will bring world peace. Nicholas Negroponte, head of the Massachusetts Institute of Technology's Media Laboratory, told an information technology conference in Brussels on Tuesday that the potential of the global computer network has actually been vastly underrated. "I have never seen people miss the scale of what's going on as badly as they are doing it now," he said, predicting that the Internet would do no less than bring world peace by breaking down national borders. Twenty years from now, he said, children who are used to finding out about other countries through the click of a mouse "are not going to know what nationalism is." Negroponte faulted European countries outside of Scandinavia, including France and Germany, for not climbing on the Internet bandwagon, saying they were on par with the Third World. "It's almost as if somebody took a big, thick, black magic marker and drew a line separating Scandinavia from the rest of Europe," he told the conference, sponsored by the European Commission. He specifically criticized German phone giant Deutsche Telekom for raising local phone rates and thus deterring children from tapping into the Internet. "Access by kids to the Internet should be like kids breathing clean air," he said. Negroponte said the U.S. administration was among those who had underestimated the Internet's impact, citing its prediction that electronic commerce would be worth $300 billion by the year 2001. The figure will actually hit $1 trillion by 2000, fueled by the 1 billion people who will be using the Internet by then, half of them in developing countries, he said. Negroponte, author of the book "Being Digital," said forecasters were understating the Internet's potential because they were not taking full account of children's growing "digital literacy." In the United States, he said, 85 percent of all teen-agers have access to a personal computer at home and virtually every 14-year-old is "digitally literate." "One of the reasons people underestimate the consequences is they forget how quickly children grow up," he said. Negroponte said he was focusing much of his energy on spreading the digital word to developing countries, working with a foundation named 2B1 that finances educational projects there. posibilidad
de que la bacteria del ántrax hallada en las oficinas de America Media Inc. en Boca Ratón se trata de un acto criminal. La agencia se involucró después
de que un segundo empleado de la compañía contrajera la bacteria ántrax. El
primer empleado, el fotógrafo Robert Stevens de 63 años, murió el sábado de
la enfermedad. Intolerant liberalism The west's arrogant assumption of its superiority is as dangerous as any other form of fundamentalism Madeleine Bunting Monday October 8, 2001 The Guardian The bombs have hit Kabul. Smoke rises above the city and there are reports that an Afghan power plant, one of only two in the country, has been hit. Meanwhile the special forces are on standby, and the necessary allies have been cajoled, bullied and bribed into position. That is not all that was carefully prepared ahead of yesterday's launch of the attacks. Crucially for a modern war, public opinion formers at home have been prepared and marshalled into line with a striking degree of unanimity. The voices of dissent can barely be heard over the chorus of approval and self-rightous enthusiasm. It's the latter that is so jarring, and it's a sign of how quickly the logic of war distorts and manipulates our understanding. War propaganda requires moral clarity - what else can justify the suffering and brutality? - so the conflict is now being cast as a battle between good and evil. Both Bin Laden and the Taliban are being demonised into absurd Bond-style villains, while halos are hung over our heads by throwing the moral net wide: we are not just fighting to protect ourselves out of narrow self-interest, but for a new moral order in which the Afghans will be the first beneficiaries. The extent to which this is all being uncritically accepted is astonishing. Few gave a damn about the suffering of women under the Taliban on September 10 - now we are supposedly fighting a war for them. Even fewer knew (let alone cared) that Afghanistan was suffering from famine. Now the west is promising to solve the humanitarian crisis that it has hugely excerbated in the last three weeks with its threat of military action. What is incredible is not just the belief that you can end terrorism by taking on the Taliban, but that doing so can be elevated into a grand moral purpose - rather than it incubating a host of evils from Chechnya to Pakistan. Is this gullibility? Naivety? Wishful thinking? There may be elements of these, but what is also lurking here is the outline of a form of western fundamentalism. It believes in historical progress and regards the west as its most advanced manifestation. And it insists that the only way for other countries to match its achievement is to adopt its political, economic and cultural values. It is tolerant towards other cultures only to the extent that they reflect its own values - so it is frequently fiercely intolerant of religious belief and has no qualms about expressing its contempt and prejudice. At its worst, western fundamentalism echoes the characteristics it finds so repulsive in its enemy, Bin Laden: first, a sense of unquestioned superiority; second, an assertion of the universal applicability of its values; and third, a lack of will to understand what is profoundly different from itself. This is the shadow side of liberalism, and it has periodically wreaked havoc around the globe for over 150 years. It is detectable in the writings of great liberal thinkers such as John Stuart Mill, and emerged in the complacent self-confidence of mid-Victorian Britain. But its roots go back further to its inheritance of Christianity's claim to be the one true faith. The US founding recipe of puritanism and enlightenment bequeathed a profound sense of being morally good. This superiority, once allied to economic and technological power, underpinned the worst excesses of colonialism, as it now underpins the activities of multinational corporations and the IMF's structural adjustment programmes. But recognising this need not be the prelude to an onslaught on liberalism - just the crucial imperative of recognising that, like all systems of human thought, liberalism has weaknesses as well as strengths. We need to remember this: in the heat of battle and panicky fear of terrorism, liberal strengths such as tolerance, humility and a capacity for self-criticism are often the first victims. In all systems of human thought, there are contradictions that advocates prefer to gloss over. One of the most acute in liberalism is between its claim to tolerance and its hubristic claim to universality, which Berlusconi's comments on the superiority of western civilisation brought embarrassingly to the fore two weeks ago. It was the sort of thing many privately think, but are too polite to say, argues John Lloyd in this week's New Statesman. He owns up with refreshing honesty that in the conflict between Islam and Christianity: "Their values, or many of them, contradict ours. We think ours are better." Once this kind of hubris is out in the open, at least one can more easily argue with it. These aren't just academic arguments for the home front before the cameras start rolling on the exodus of refugees into Pakistan. September 11 and its aftermath launched both an aggressive reassertion and a thoughtful re-examination of our culture and its values. Both will have a lasting impact on our relations with the non-western world, not just Muslim world. It is that aggressive reassertion that smacks of fundamentalism, a point obliquely made by Harold Evans recently: "What do we set against the medieval hatreds of the fundamentalists? We have our fundamentals too: the values of western civilisation. When they are menaced, we need a ringing affirmation of what they mean." The only problem is that "ringing" can block out all other sound and produce nothing but tinnitus. There is a compelling alternative for how we can coexist on an increasingly crowded planet. Political philosopher Bhikhu Parekh starts from the premise that "the grandeur and depth of human life is too great to be captured in one culture". That each culture nurtures and develops some dimension of being human, but in that process it misses out others, and that progress will always come from dialogue between cultures. "We are all prisoners of our subjectivity," argues Parekh, and that is true of us individually and collectively, so we need others to expose our blindnesses and to increase our understanding of our humanity. Parekh argues that liberalism is right to assert that there are universal moral principles (such as the rights of women, free speech and the right to life), but wrong to insist there is only one interpretation of those principles and that that is its own. Rights come into conflict and every cul ture negotiates different trade-offs between them. To understand those trade-offs is sometimes complex and difficult. But no one culture has cracked the prefect trade-off, as western liberalism in its more honest moments is the first to admit. There is a huge amount we can learn from Islam in its social solidarity, its appreciation of the collective good and the generosity and strength of human relationships. Islamic societies are grappling with exactly the same challenge as the west - how to balance freedom and responsibility - and we need each other's help, not each other's brands of fundamentalism. If we are asking Islam to stamp out their fundamentalism, we have no lesser duty to do the same. m.bunting@guardian.co.uk Latest breaking news 07.10.2001: Attack on Afghanistan begins (de Refuse & Resist the Atmosphere of Retribution & Repression) Not in Our Son's Name Letter from Phyllis and Orlando Rodriguez September 18, 2001 Our son Greg is among the many missing from the World Trade Center attack. Since we first heard the news, we have shared moments of grief, comfort, hope, despair, fond memories with his wife, the two families, our friends and neighbors, his loving colleagues at Cantor Fitzgerald / ESpeed, and all the grieving families that daily meet at the Pierre Hotel. We see our hurt and anger reflected among everybody we meet. We cannot pay attention to the daily flow of news about this disaster. But we read enough of the news to sense that our government is heading in the direction of violent revenge, with the prospect of sons, daughters, parents, friends in distant lands dying, suffering, and nursing further grievances against us. It is not the way to go. It will not avenge our son's death. Not in our son's name. Our son died a victim of an inhuman ideology. Our actions should not serve the same purpose. Let us grieve. Let us reflect and pray. Let us think about a rational response that brings real peace and justice to our world. But let us not as a nation add to the inhumanity of our times. * Copy of letter to White House: Dear President Bush: Our son is one of the victims of Tuesday's attack on the World Trade Center. We read about your response in the last few days and about the resolutions from both Houses, giving you undefined power to respond to the terror attacks. Your response to this attack does not make us feel better about our son's death. It makes us feel worse. It makes us feel that our government is using our son's memory as a justification to cause suffering for other sons and parents in other lands. It is not the first time that a person in your position has been given unlimited power and came to regret it. This is not the time for empty gestures to make us feel better. It is not the time to act like bullies. We urge you to think about how our governement can develop peaceful, rational solutions to terrorism, solutions that do not sink us to the inhuman level of terrorists. Sincerely, Phyllis and Orlando Rodriguez September 18, 2001 12/09/2001 - "Dele una posibilidad a la paz". > >Lo que ha pasado induciría al pánico, al silencio, a la desesperación. >El mundo ha sido golpeado por una enésima masacre. >Pero es necesario, aunque doloroso, hablar. Tratar de entender. >La primera observación que se nos ocurre es lo absurdo que explota afuera >de la televisión. >Frente a esta tragedia el mundo se ha parado atónito. Pero no todos. >Las bolsas del mundo no se han parado ni un segundo, han seguido haciendo >dinero, a buscar útiles salvajes. Más aún han intensificado el ritmo. >La gente todavía gritaba colgada a los rascacielos en llamas, antes que se >derrumbaran, y ya los broker gritaban en sus celulares: "¡compra petróleo! >¡Vendas todo! ¡Compra petróleo! Y mientras los títulos de las acciones >perdían el 10% en pocos minutos el petróleo subía de 10 dólares por barril >i los astutos ganaban útiles de billones de dólares. >Y mientras los presidentes de todos los países europeos se apuraban a >expresar su pesar, sus banqueros chupaban decimales de dólar y finalmente >el Euro marcaba unos buenos puntos en su favor. >Nadie ha pensado en cerrar las bolsas por decencia y respeto hacia los >cadáveres todavía frescos. >La bestia feroz del capitalismo hundía feliz sus dientes en las carnes de >los muertos y fortunas luminosas se constituyeron en pocas horas. >No hay de que sorprenderse. Los grandes especuladores chapotean dentro de >una economía que mata cada año a millones de personas con la miseria, ¿qué >quieren que sean 20 mil muertos en Nueva York? >Otra imagen terrorífica: la gente en la calle, en los barrios palestinos, >destrozados por la guerra civil, quienes festejaban la masacre. Gente que >tiene un muerto en cada familia y que ya no logra ver más lo absurdo de la >muerte, de cualquier muerte. >El sistema de la violencia, de la explotación, del genocidio organizado de >los pobres desamparados, genera insensibilidad a la violencia. Genera la >lógica de la venganza. >Casi cada día, desde hace años, los aviones USA bombardean Iraq, matando >mujeres y niños con el pretexto de eliminar instalaciones de radares. Y las >televisiones occidentales ni se toman la molestia de reportar la noticia. >Claro, esa gente es basura, mueren a miles y miles por los efectos de los >proyectiles con Uranio que han contaminado sus tierras, mueren porque >faltan medicamentos a causa del embargo, en el silencio cargado de >desprecio de los medios de comunicación occidentales. Las lagrimas que hoy >derraman los comentadores televisivos son vergonzosas porque siguen al >silencio decenal acerca de los crímenes del occidente cristiano. >Es terrible pero es así: la desesperación genera la locura de la venganza. >Una venganza que no sirve de nada, una venganza que traerá otras masacres >entre los desheredados del mundo. >Y atención: esta horrorosa masacre de ayer, no ha sido realizada apretando >un botón desde un avión que vuela seguro en alta cuota. Aquí hay decenas de >personas que se han vuelto tan locas como para suicidarse todas juntas para >lograr golpear "los demonios blancos". >Esta medida de la desesperación debería hacer reflexionar. >Este día de terror debería haber enseñado a los devotos del culto de la >fuerza del hombre blanco que no existe seguridad y paz para nadie en un >mundo donde la masacre y la prevaricación son la ley. >Ya es un hecho. Las modernas tecnologías hacen tan poderosos a los >individuos que ningún sofisticado sistema de seguridad puede proteger. >Ya no es posible, tampoco para los norteamericanos ricos, creer de tener >seguridad. No hay ningún lugar donde se pueda estar afuera de peligro. >El perro feroz de la locura puede adentellar a cualquiera por doquier. >Los periodistas televisivos se sorprenden (idiotas) de que los super >controles USA no hayan impedido a cuatro aviones de ser desviados para ser >usados como bombas gigantescas y golpear los lugares más protegidos del >mundo. No quieren entender que las modernas tecnologías y el incontrolable >crecimiento de las muchedumbres en las ciudades, ofrecen decenas de maneras >de hacer masacres. >Estos horrorosos atentados han ridiculizado las pretensiones de Bush de >construir un escudo estelar. >Hoy han usado aviones, ayer gas nervino en Japón, garrafas de gas en >Moscú... >Mañana será suficiente gritar: "¡Hay una bomba!!!" en un estadio para >provocar un estrago. Un país moderno no puede garantizar la seguridad sin >estrangular completamente la "vida normal" de los ciudadanos. No hay como. >Nadie puede mantener a millones de personas encerradas en sus casas. >La única garantía de seguridad para el mundo rico es sanar las heridas >sangrantes del hambre y de los abusos. De otra manera se crea un humus >social dramático que solo puede llevar a la violencia más loca. >Atención: no se pude decir, en este momento, quien haya armado la mano de >los kamikaze. >¿Extremistas islámicos? ¿Extremistas americanos de derecha? ¿Sionistas >locos? ¿Quién sabe? >El atentado de Oklaoma, la más grande masacre terrorista ocurrida hasta >ayer, fue atribuida a los terroristas islámicos y luego se descubrió ser >obra de terroristas blancos y fascistas quienes querían provocar una >reacción anti islámica. Se podría también descubrir que detrás de la >masacre de ayer se encuentren todas las facciones terroristas y todos los >servicios secretos, unidos en el común intento arrojar a la sociedad civil >en el caos... >Una cosa es cierta: más allá de quienes sean los ejecutores materiales de >la masacre, esta violencia es hija legitima de la cultura de la violencia, >del hambre y de la explotación inhumana. >Esta violencia, estas muertes, hacen inmensamente felices aquellos que han >ganado millones de dólares en pocas horas especulando sobre el precio del >petróleo, los mercados de las armas y los jefes terroristas brindan ebrios >de felicidad juntos a los generales y los almirantes, cansados de esta paz >rastrera que amenaza cada día el estado de guerra y las ganancias hechas >sobre las bombas anti hombre. >Mañana los aviones de caza bombardearán alguna aldea perdida matando a >civiles inermes con la excusa de hacer justicia de los culpables y las >lobby da las hienas empujarán para dar dignidad a los gastos militares. >"Los Estados Unidos deben responder inmediatamente a esta agresión" gritaba >un imbécil de la calle y sus palabras han dado la vuelta del planeta >trasmitidas por miles de noticieros. >"¡Represalia!" Grita Bush, el verdugo del Texas. >Golpearán, harán 10 muertos con la piel oscura por cada cadáver blanco. Y >alguien propondrá de reaccionar con manifestaciones en plaza y de nuevo la >policía hará muertos. >Tiene que estar claro para todos que esto es un momento gravisimo. >Es una nueva forma de guerra disimulada aquella donde nos quieren llevar. >El partido de la paz tiene una sola posibilidad: seguir testarudamente >trabajando con los instrumentos de la paz. Afirmar con toda la fuerza >posible que podemos y es necesario quitar nuestro apoyo económico a las >multinacionales de la muerte. >Hoy más que nunca la elección individual de millones de personas es el >único instrumento posible, la única estrategia ganadora. >Sacamos nuestro dinero de los bancos que financian la venta de armas, >quitamos nuestro dinero de la economía del dolor, dejamos de comprar el >carburante de la Esso, los productos de Nestlé, dejamos de tomar Coca Cola, >de comer Mac Donald's, convertimos nuestros autos a gas y pedimos autos con >propulsores eléctricos, ponemos nuestros ahorros en fondos de inversiones >éticas, abandonemos los seguros conectados con el sistema de la muerte, no >compremos coches de quien produce bombas anti hombre, no compremos zapatos >de quien mantiene como esclavos a los niños, no comemos los alimentos de la >quimica, abandonemos las marcas de la cultura de la ganancia a toda costa. >En estos años hemos trabajado con éxito para demostrar que es posible hacer >compatibles nuestros consumos, ahorrar, tener mejores productos y, al mismo >tiempo, boicotear el mercado de la muerte rehusándonos en llevar nuestro >dinero a su molino. >Hoy estas elecciones ya no son solamente justas y convenientes, son también >urgentes e impostergables. >Te pedimos hacer este gesto, inmediatamente, ahora mismo. >Ya no hay tiempo para pensarlo aún. La locomotora del capitalismo salvaje >está acelerando su velocidad, apunta con determinación absoluta hacia la >guerra y la destrucción del planeta. La única posibilidad es cortarle el >abastecimiento de carburante. >Enseguida. El mundo está gobernado por el dinero. La plata es el único >argumento al que los poderosos sean sensibles. Dale una posibilidad a la >paz. Enseguida. Empieza tu. No esperes que lo hagan otros. Cada peso que >quites a los señores del mundo es un respiro que regalas a la humanidad. >Votas cada vez que haces compras. > >Dario Fo, Franca Rame, Jacopo Fo > > Eduardo Grüner > > (Se dice: el tema es demasiado difícil, y ya se ha dicho demasiado sobre > él. Se dice: ¿cómo encontrar la manera de decir algo diferente: de > diferenciarse del "o con los unos o con los otros", y al mismo tiempo de no > caer en "estamos en contra pero...". Se dice: de todas maneras, lo que > digamos hoy estará obsoleto mañana, los cambios son vertiginosos, los > acontecimientos se precipitan, etcétera. Se dice: hay que esperar, apostar > a una "larga duración" que nos permita tomar distancia, tener elementos > para analizar las cuestiones de fondo. Se dice: igual, lo que sucedió > realmente -siendo lo que son los "secretos de Estado" y la campaña de > desinformación históricamente inédita- no lo sabremos jamás. Se dice: > ¿quiénes somos nosotros, ante la catástrofe "civilizatoria", para sentar > apresuradamente una posición que tal vez la semana próxima no podremos > sostener? Todo eso se dice. Todo eso es cierto. Pero no somos periodistas. > No estamos obligados a "informar seriamente", a esperar las evidencias > empíricas. Tampoco somos grandes pensadores de la humanidad: no nos > sentimos obligados a acuñar definitivas palabras de mármol. Entonces > decimos -o mejor, lo decía el Innombrable de Beckett, en circunstancias > mucho menos urgentes, porque él ya había llegado hasta el borde-: "ya no > hay nada que decir, pero es necesario seguir hablando".) > Dejemos a los psicólogos, si les interesa, el examen de la pequeña, > ambivalente, mezquina, secreta, inconfesable satisfacción que a muchos > puede haberles producido lo que se produjo: no es que sea poca cosa como > tema, pero no es lo más interesante por el momento. Dejemos a algún > inexistente Jauretche el análisis de la zoncera criolla -no están los > tiempos para demasiadas vivezas- que con igual ambivalencia festeja la > astucia artesanal (¿un equivalente de nuestro proverbial "alambrecito"?) de > los que se las arreglan para sortear los más eficientes escudos > tecnológicos del Imperio: quizá algún comentarista de fútbol vuelva a > hablar, y esta vez mucho más literalmente, de "la mano de Dios". Dejemos a > ciertos lacanianos -no todos, por suerte- la tentación de elevar a Osama > Bin Laden a la categoría de "objeto a ", para explicar por qué muchas > mujeres pueden excitarse con su estampa violentamente varonil. O por qué > ante la ausencia o la degradación de liderazgos mundiales, puede ejercer > cierta fascinación de Padre Terrible de la freudiana Horda Primigenia. O > por qué hasta ciertos miembros del establishment financiero no dejan > también de sentir alguna fascinación por lo que se sospecha de sus > habilidades especulativas. Dejemos a los expertos en relaciones > internacionales dibujar sus nuevos mapas geopolíticos y estratégicos. > Dejemos a los conspiradores profesionales imaginar -y no porque sean de > plano descartables- las hipótesis sobre complicidades internas, incluso de > alto nivel, tendientes a legitimar nuevas guerras galácticas. Dejemos a los > entendidos en Inteligencia que especulen -muchos lo harán convergiendo con > los conspiradores- sobre la sugestiva ineficacia de los catorce "servicios" > con los que cuenta el país afectado. Es mucho dejar de lado, ciertamente. > Pero ya sabemos que no se puede, ni es deseable, decirlo todo. > Vamos, pues, por (las) partes. Ante todo, este acto de terrorismo > es inequívocamente condenable tanto por razones morales como políticas: el > terrorismo elitista que sustituye con su propia soberbia la organización > democrática de las masas populares, y de paso asesina a muchos de aquéllos > a los que dice defender, tiene siempre un efecto objetivamente > reaccionario: deslegitima la causa de esas mismas masas que vienen > resistiendo esforzadamente al terrorismo del Poder. Un potentado > multimillonario (si es que fue él) que oprime a su modo a "sus" propias > masas y especula en la Bolsa de la muerte no es un "revolucionario": > ponerlo a la altura de revolucionarios auténticos -no importa lo que se > piense de cada uno de ellos- como Robespierre y Marat, Lenin o el Che > Guevara, Rosa Luxemburgo o Lumumba, Gandhi o Fanon, es una total falta de > respeto. Es tan demencial como la pretensión bushiana (y delarruísta, ¿por > qué no mencionarlo?) de que los atacantes tuvieron a todo "occidente" en su > mira. Esto no habría ni que decirlo, pero la estupidez ideológica reinante > parece que obligara a hacer estas aclaraciones para después poder criticar > con la conciencia tranquila el terrorismo del Estado Imperial. > En general, no me conforman casi ninguna de las cosas que se han > dicho sobre esta cuestión. Que esto es una respuesta a las múltiples y > sangrientas agresiones que el Imperio viene desarrollando desde Hiroshima > en adelante, es una verdad de Perogrullo, pero no dice nada sobre la > naturaleza y la calidad de la "respuesta": no se puede remitir la política > a una simple relación causa / efecto como en el mundo físico; en política, > la misma causa puede producir efectos muy diferentes, y no toda "respuesta" > vale por el sólo hecho de serlo. Que la "guerra" no empezó el 11 de > septiembre sino mucho antes, como creo que ha dicho Petras, es otra > obviedad (quizá menor que la anterior, dada la uniformidad del discurso > propagandístico imperial), pero presenta una dificultad de periodización, > que es esencial para un análisis histórico-político: ¿hasta cuándo hacemos > retroceder el origen? ¿A la anexión de la mitad de Mexico, a la guerra de > Cuba y Filipinas, al golpe contra Jacobo Arbenz? ¿Por qué no a 1492 > (después de todo, este Imperio es a su modo heredero de toda una vocación > colonial del occidente moderno)? Todo ello sería, quizá, pertinente, pero > no nos dice nada nuevo. > El más confuso y equívoco -por la indudable tentación que supone- > es el discurso que se pone a comparar las cifras de las víctimas (o peor, > como en un e-mail que anda circulando, que saca cuentas sobre cuántos > minutos de silencio le corresponderían, proporcionalmente, a los muertos de > VietNam, de Nicaragua o de la Argentina). Es evidente que el Imperio, con > sus armas o con su política económica, ha masacrado en su larga historia > mucha más gente, incontablemente más gente, que los aviones en las Torres > Gemelas o en el Pentágono. Pero la simple cuantificación de los muertos > -como ha dicho bien Juan Gelman- es una inmoralidad, aparte de que tampoco > sirve para un análisis político, ni de crítica cultural, ni de nada. Voy a > ser lo más claro posible, a riesgo de granjearme la antipatía de muchos : > aunque el 11 de septiembre hubiera habido un solo muerto, y aunque ese > único muerto hubiera sido el presidente Bush, el director de la CIA o el > jefe del Pentágono, sería igualmente criticable. Por una sencilla razón: la > "cualidad" de la muerte, no menos que su cantidad, no es en sí mismo una > justificación, ni un argumento ideológico, político, ético. Es cierto: no > se puede ahora construir una teoría de los Dos Demonios a nivel "global"; > lo que se dijo para la Argentina, hasta cierto punto , vale para el mundo: > el terrorismo de Estado (nacional o imperial) no es comparable al > terrorismo "particular" de los "equivocados". Pero, "hasta cierto punto": > Bin Laden (si es que fue él; y si no, quien corresponda) no es un jefe de > la resistencia popular, ni está "equivocado". En esas condiciones, festejar > sus "aciertos" es indefendible. > Tampoco se puede simetrizar la cuestión: por un lado, es > completamente cierto que este acto debe ser analizado en el contexto de las > continuidades, de las relaciones -aún contingentes- causa/efecto(s), > etcétera; por el otro, cada acto terrorista debe al mismo tiempo ser > juzgado en sí mismo , como un hecho absoluto , puesto que pone en cuestión > la vida y la muerte de inocentes, y no en el sentido inmediato (se me > responderá que Bush o el director de la CIA no son, desde luego, > "inocentes"), sino también por las consecuencias previsibles que puede > acarrear: por ejemplo, la fascistización o militarización del mundo que se > augura como "contrarrespuesta", y que sin duda los terroristas no han > inventado, pero a la que le proporcionan una buena excusa. No soy un > moralista, ni un idealista ingenuo: sé perfectamente que el terrorismo > puede ser vivido como el único recurso de los desesperados, y que en > ciertas situaciones ha sido sistemáticamente utilizado por aquéllos mismos > que ahora se rasgan las vestiduras porque les tocó a ellos: lo usó la > resistencia francesa contra los nazis, pero no lo creyeron legítimo cuando > lo usaron los argelinos contra la opresión francesa; lo usaron los judíos > contra los ingleses, pero no lo creen legítimo cuando lo usan los > palestinos contra el Estado de Israel. Lo usó el Estado norteamericano de > diversas maneras contra el Tercer Mundo, pero sólo ahora descubren lo > horroroso que puede ser. Eso es, en algún sentido (no "correcto" pero sí) > lógico: la política también consiste en descalificar lo que uno mismo ha > hecho cuando lo hace el adversario. O en justificar lo propio porque antes > lo hizo el otro. Pero razonando así no vamos a ninguna parte: quedamos > atrapados en el mismo círculo, ya que, aunque sea invirtiendo los valores, > confirmamos el lugar en el que nos pone el adversario, cuando se trataría > de demostrar que somos diferentes (y, por supuesto, mejores). > Ninguna de las dos partes está haciendo esto: están en mutua relación > especular. Que Bin Laden (si fue él) es un terrorista, no hay dudas. Y si > alguien tenía dudas sobre sus (ex amigos y actuales) enemigos, ahora se van > a despejar: EEUU como Estado está poniéndose rápidamente fuera de la Ley, > porque está emprendiendo una "guerra" no declarada contra un "particular", > que no representa a Estado alguno, sin aportar pruebas, sin que siquiera se > conozca que haya un juez, norteamericano o de las cortes internacionales, > que haya iniciado una investigación de ese terrible delito. Claro que los > antecedentes del otro hacen verosímil la sospecha. Pero la ley no actúa con > verosímiles, sino con pruebas. Al menos la ley positiva, que es la que rige > a los Estados: el mero "ojo por ojo" no es justicia (infinita o limitada > por "libertades duraderas") sino venganza bíblica. O sea: fundamentalismo. > Como cualquier Estado totalitario, EEUU se ha apoderado de la Ley, para > retorcerla a su capricho; si unimos a eso su agresividad y potencia bélica, > parece confirmarse una de las tesis de Negri y Hardt en su libro Imperio : > por más difuso o "microfísico" que parezca el poder en la agonizante > postmodernidad, el Imperio, en su decadencia, y en forma similar al Imperio > Romano en la suya, refuerza su monopolio de dos poderes bien centralizados: > el jurídico y el militar. Sólo que el mero poder , incluso si "jurídico", > no es Ley. Sobre todo, no lo es desde el punto de vista de su potencia > simbólica que (ahora sí) suelen pensar los psicoanalistas. Es, > efectivamente, demasiado pronto para especular sobre si todo esto -no el > atentado en sí mismo: sus consecuencias- significa un derrumbe del Imperio. > Pero está claro que la conducta por lo menos errática tanto en el plano > jurídico como militar contribuye al deterioro de su autoridad, incluso, y > especialmente, ante sus "amigos": con la esperable excepción del chirolita > Blair, hay que decir que los gobiernos europeos, y la mismísima NATO, con > mayor oportunismo del habitual, han sido bastante prudentes. > Todo esto representa una enorme dificultad para el pensamiento: > el terrorismo -sea el de los estados imperiales o el de los "particulares"- > siempre lo es, porque en su traducción ideológica del "conmigo o contra mí" > (que es como presenta las cosas Bush) genera una espiral discursiva > fascista, totalitaria: el totalitarismo no consiste tanto en prohibir > pensar algo como en obligar a pensar una sola cosa. La solución no es > tampoco una "tercera posición" que seguiría respondiendo a la misma lógica, > sino un completo desplazamiento de esa dicotomía. Hay que empezar, > parecería, a discutir otras cosas : por ejemplo, la estructura entera de > una sociedad "global" que ha conducido al mundo a esta situación > terrorífica, y que ha producido ambas formas de terrorismo: las clases > dominantes occidentales en general, y muy especialmente las > norteamericanas, así como el pueblo norteamericano y occidental que ellas > también oprimen y que ahora se han transformado en víctimas directas, > deberán dejar de hacerse los distraídos y de imaginarse que los males les > llegan siempre de un Afuera incomprensible, de un Mal metafísico y ajeno > con el que ellas no tienen nada que ver. Si las "partes" no son remitidas a > su conflicto con el Todo, si seguimos insistiendo en un pensamiento > fetichista, no remontaremos jamás el "vaciamiento discursivo", el "derrumbe > del pensamiento crítico" que nos está aplastando. Dijimos estas cosas > solemnes, en su momento, respecto del atentado a la AMIA: ilusos de > nosotros, creíamos que allí había un antes y un después; resultó que todo > "después" puede ser un "antes" de otra cosa. > > 2.- > Uno se siente tentado de acuñar una fórmula paradójicamente postmoderna: > estamos ante el fin de la postmodernidad. Si el derrumbe del muro de Berlín > legitimó el mediocre ideologema del "fin de la historia", ahora el derrumbe > de las Torres Gemelas hace pensar en "el fin del fin". (Dicho sea entre > paréntesis, es bastante sintomático que el concepto "postmoderno" haya > salido de la arquitectura, allá por los años 70, y que tanto su > consagración como su fin se vinculen al derrumbe de construcciones > arquitectónicas). O, si se me permite autocitar el título de un próximo > libro (un libro que temo que a esta altura ya haya quedado completamente > obsoleto), el "fin de los grandes relatos" viene a ser sustituido por el > "fin de las pequeñas historias". > Pero podemos ser aún más paradójicos: en verdad, se trata de una > forma perversa de la dialéctica hegeliana; es la plena realización de la > postmodernidad lo que ha producido su fin. Y eso en varios sentidos. > Primero, aunque no principal: el nuevo y terrible Enemigo que se ha > conseguido el Imperio responde fielmente a la imago del mundo postmoderno: > es "fragmentario", está disperso en retazos de contornos borrosos pero > incomunicados entre sí, es "rizomático", no reporta a ningún Poder central > -mucho menos estatal o nacional, aunque se haga de Afganistán u otros > países el "chivo emisario" para el sacrificio ritual de turno-; es decir: > le devuelve al Imperio, que es el mayor productor de la ideología > postmoderna, su propia y falsificada imagen. No sólo se la devuelve, sino > que la vuelve contra él. Es algo que refuerza la hipótesis de que el > llamado "neofundamentalismo" no representa ningún misterioso retroceso > arcaizante a los bárbaros tiempos premodernos, sino un fenómeno > estrictamente postmoderno, producido por el neoliberalismo y la llamada > "globalización". No me refiero solamente a la obviedad de que los EEUU > alentaron en su momento, porque les convenía, lo que ahora se transformó en > su Frankenstein (creo que se le ha dado exagerada importancia a esta > "hipocresía", que es una práctica muy común en los juegos de poder > internacional), sino al tema mayor de que es toda la reconversión, > económica y cultural, del capitalismo en las últimas décadas lo que ha > producido el fenómeno. Y el "fenómeno" marca los límites de la > postmodernidad cuando es llevada al extremo de dejar regiones y culturas > enteras del planeta fuera de un tan celebrado "multiculturalismo" que es, > en realidad, el multiculturalismo de los poderosos que se pueden dar el > lujo de ser "tolerantes" cuando tienen la hegemonía. > También es sintomático de esto que entre las víctimas del > atentado hubiera más de 60 nacionalidades: parecería que estamos asimismo > ante el estallido final del "multiculturalismo", y no sólo porque el > Imperio vaya a provocar ahora su propia jihad contra el Islam: también > porque ahora se sabe (nosotros lo sabíamos desde la AMIA) que las > potenciales víctimas pueden ser cualquiera , y no sólo norteamericanos > rubios de ojos celestes. Y, como contrapartida, porque empieza una nueva > "era de la sospecha" hacia cualquiera que no sea rubio y de ojos celestes, > y eso en Nueva York, la ciudad más "multicultural" del planeta. Otra vez: > el colmo del multiculturalismo, en condiciones de profundizada desigualdad > -y de los dispositivos ideológicos que la desplazan hacia la guerra de > pobres contra más pobres-, conduce al racismo. La imagen postmoderna de un > mundo sin "fundamentos" muestra entonces su otra cara: la de una búsqueda > desesperada de fundamentos por parte de aquéllos que no tienen nada que > fundar, porque ya han sido expulsados fuera de la Historia -se entiende que > no estamos hablando de Bin Laden (si fue él), que no está en absoluto fuera > de la Historia, sino de los que pueden ver en él o en alguien como él la > tentación de un liderazgo-. Eso es el "fundamentalismo": una pulsión > refundadora que, al no tener objeto, se vuelve destructiva y criminal, como > si dijera: "Puesto que nos han dejado sin fundamento para nuestra > identidad, para nuestra cultura, lo que nos queda es bombardear los > fundamentos de los que provocaron todo eso". La masacre de las Torres > Gemelas es insoportable e injustificable, pero no inexplicable. No es > "irracional": es un subproducto deleznable -aunque no el único- de la > racionalidad del actual orden mundial. Por eso es al mismo tiempo la > realización y el fin de la postmodernidad. Es decir, en el estricto sentido > del término: su culminación . > Como tal culminación, pertenece al orden estricto de la materia. > Este es, muy precisamente, el segundo sentido en que se puede hablar del > fin de la postmodernidad. Se terminaron los simulacros. No creo que > aparezca ningún Baudrillard que diga: "El atentado contra las Torres > Gemelas no ha tenido lugar". Desde luego que esto es así, en primer > término, porque un atentado contra la capital del Imperio tiene mucha más > prensa -es decir, mucha más "realidad"- que la Guerra del Golfo, no > digamos ya que los bombardeos casi cotidianos contra Irak, por ejemplo. > Pero, en un sentido menos obvio, esto es así porque, de nuevo, el Imperio, > que ha sido el mayor productor de "simulacros", se ha reencontrado con "el > desierto de lo real", como lo dice agudamente Zizek en un artículo > reciente. Se han materializado los más apocalípticos fantasmas del > "simulacro" holliwoodense, sin que aparezca un Bruce Willis o un Stallone > para restaurar el orden (Bush es un pobre candidato para ese papel). Por > eso no es, como se ha dicho, un acontecimiento "impensable": ¿cómo va a ser > impensable lo que ha sido pensado innumerables veces por mediocres > guionistas del mundo del espectáculo? El pasaje de lo imaginario a lo real > no es impensable: sólo es, por definición, sorpresivo. > Ese término -"materializado"- es muy importante: hay, de la peor > manera, como si dijéramos un retorno de la materia a un mundo que estaba > altamente "desmaterializado": Internet, los medios de comunicación de > masas, la CNN, y el propio modelo de acumulación de un capitalismo ya no > esencialmente productivo, sino especulativo y hecho de una volátil > circulación de signos monetarios "informatizados" por el espacio virtual, > todo eso había creado un mundo abstracto donde el sufrimiento, la miseria, > la violencia y la muerte inflingidos a miles de millones "no tenía lugar". > Pero, de pronto, vuelve a tenerlo: de pronto, un hecho como este, aunque a > alguien pueda parecerle injusto que se le preste más atención que a otros > (pregunta tonta: ¿cuándo se paralizó la gente ante los televisores para > presenciar espantada las masacres de Rwanda o Bosnia?), nos hace tomar > conciencia de que, por detrás de los "simulacros", lo que siempre estuvo en > juego fueron los cuerpos , la materialidad concreta y sufriente de seres > vivos, tan vivos como lo estaban ayer los cincuenta o cien niños que, según > se dice, murieron de hambre hoy solamente en nuestro país. O como lo > estaban el 10 de septiembre los quién sabe cuántos miles de trabajadores > asesinados en las torres. > El "quién sabe cuántos" va a cuenta de que, por supuesto, la > lógica del simulacro seguirá, por algún tiempo, estando activa: ha servido > -como lo dijo Rossana Rossanda- para hacernos ver la caída de las Torres no > una, sino diez mil veces, hasta convencernos de que efectivamente se había > puesto en marcha una guerra: quizá la entera isla de Manhattan había sido > derrumbada (ironías de la historia: ¿no se llamaba "proyecto Manhattan" > aquél secreto trabajo en el desierto de los científicos que inventaron la > bomba atómica?). Pero el simulacro tiene también sus límites, o sus lapsus > : la férrea autocensura comunicacional no nos ha permitido ver ni uno solo > de esos cuerpos, vivos o muertos, sepultados bajo los escombros de la > postmodernidad; los ha transformado en ¿osaremos pronunciar la palabra? > desaparecidos . Pero sabemos que están allí: su "realidad" no se nos puede > ocultar aunque se nos prive de su imagen. O, más bien, sabemos que están > allí, que son reales, justamente porque no tenemos su imagen televisiva. > Algo semejante, me parece, ocurrirá con la nueva guerra que, mientras se > escribe esto, está por empezar: si se pudo decir "la guerra del Golfo no ha > tenido lugar", es porque de ella sólo vimos imágenes de misiles luminosos > cruzando la noche, como un festival de fuegos artificiales. De esta nueva > guerra no tendremos imágenes, porque -por las características geográficas > de Afganistán, o por lo que sea- será algo así como una guerra a la > antigua, casi cuerpo a cuerpo , en otro retorno de la materialidad > siniestra. Si juntamos eso con la aparente estupidez (que no es tal) de > prohibir las películas o las canciones que hablen de violencia y muerte, se > refuerza la hipótesis inicial: se acabaron los simulacros. Es, como se > dice, la hora de la Verdad. > > 3.- > El "fin de la postmodernidad", si es que es eso, convocará a lyotardenses, > virilianos y semejantes a, como se dice, pensar el futuro: esperemos, > porque se viene, la implacable competencia entre intelectuales > preferentemente franceses por acuñar etiquetas mediáticas para designar a > la nueva época (con definiciones, desde ya, plenas de incertidumbre y > contingencia: no sea cosa que se los acuse de buscar fundamentos ). > Dejémosles, también, esa tarea ímproba. "Pensar el futuro" quizá sea una > empresa demasiado ambiciosa -o demasiado insoportable- en estos momentos. > Conformémonos, por ahora, con interrogarnos por la posibilidad de pensar el > presente. ¿Con qué herramientas teóricas, intelectuales, "científicas"? Es > difícil decirlo. No soy de los que caen rápidamente en una visión > apocalíptica del "fin de los paradigmas". Los acontecimientos actuales no > son totalmente impermeables a la indagación de una economía, una ciencia > política o una sociología de espíritu crítico: aquí no se trata de hacer > generalizaciones abstractas (o ideológicamente interesadas) del tipo del > "choque de civilizaciones" u otras sandeces por el estilo (entre otras > razones porque ese slogan siempre me pareció autocontradictorio: ¿no > habíamos quedado en que, con el "fin de la historia", aquí había una sola > civilización?): la clase gobernante norteamericana, y mucho menos Bush, no > representan a la civilización occidental, aún cuando admitiéramos esa > entelequia falsamente universalista; y una banda de fascinerosos > "particulares" no representa a una sociedad exquisita, de una complejísima > tradición cultural y religiosa, como es el Islam. Dicho lo cual, y con > alguna mayor sobriedad, pensemos nuevamente: si Bush no representa a la > "civilización occidental", y los otros no representan al Islam, es porque > una civilización, con toda su complejidad y contradicciones internas, con > una dinámica cultural que redefine permanentemente sus límites, con unos > "orígenes" civilizatorios de siempre dudosa fechabilidad, es algo > estrictamente irrepresentable . Pero no porque quienes se erigen en sus > "representantes" no tengan nada que ver con ella. Es uno de los temas a > pensar, y su brutal dificultad no lo hace sin embargo imposible : ¿acaso no > acometieron una empresa tan desalentadora como esta los miembros de una > escuela llamada de Frankfurt, cuando tuvieron el insólito coraje de > conjeturar una continuidad entre Descartes y Auschwitz? > La idea del Lager como paradigma metafórico de aquéllo en lo que > se ha transformado la sociedad moderna es originariamente de Walter > Benjamin, que ya poco antes de suicidarse, en 1940, tuvo ocasión de > reflexionar sobre las analogías entre la organización tecnocrática del > capitalismo mundial y la eficiencia siniestra del campo de concentración. > Después, célebremente, Adorno y Horkheimer, en la Dialéctica del Iluminismo > , le dieron a Auschwitz todo su estatuto de símbolo de la racionalidad > instrumental moderna, y se atrevieron a sostener que el nazismo no había > representado ninguna locura incomprensible "caída del cielo" -valga la > expresión, en estos días- como rayo en día sereno, sino la estricta > realización de una de las potencialidades de la razón moderna. Y no para > desesperar de la razón, sino para verla lúcidamente como lo que es: un > campo de batalla en ebullición permanente, que por sí sola no garantiza en > absoluto la emergencia de un mundo mejor. > Hoy, la cuestión se complica aún más. Cuando Max Weber -de quien > la Escuela de Frankfurt extrajo en principio la idea- se quejaba de la > disociación entre una racionalidad instrumental que ponía el acento en un > mero cálculo de la relación medios / fines, y una racionalidad sustancial o > material que tomara en cuenta los "valores" (éticos, políticos, religiosos, > culturales) no pudo prever lo que podía provocar, al revés, su asociación > en determinadas circunstancias históricas: eso dio Hitler. Es decir, el > creador de Auschwitz, que sin duda supo poner toda la racionalidad > instrumental y técnica del capitalismo disponible en su época al servicio > definitivo de sus "valores". La lógica del mundo actual ha consagrado esa > conjunción funesta, y el atentado a las Torres Gemelas -así como sus > antecedentes y sus posibles consecuencias- es un símbolo perfecto de ese > estado del mundo: los terroristas ponen toda la racionalidad instrumental y > técnica de unas poderosas máquinas de volar inventadas por Occidente al > servicio de sus "valores trascendentales", y Bush hace otro tanto cuando > pone la más poderosa y racional maquinaria bélica de la historia al > servicio de sus propios "valores", a los que identifica con la Civilización > como tal. O sea: Hitler va ganando, después de todo. Y su victoria es más > grande de lo que sus ensueños más delirantes podían imaginar: consiguió que > los supuestos "enemigos" se encontraran luchando con las mismas armas, bajo > la misma lógica. > ¿Qué hacer, entonces? ¿Renunciar a la Razón? Pero eso sería darle > la razón a "Hitler", a la inmensa podredumbre del presente, de la cual la > sangrienta historia occidental no puede desentenderse. Al contrario: se > trata de ensanchar la Razón, de hacer entrar en ella su propio conflicto > constitutivo y determinado por la "injusticia infinita" de una sociedad > "global" que va en camino de constituirse en un inmenso Lager . No es > cuestión, tampoco, de ponerse apocalípticos (eso es lo que querría > "Hitler": que frente a nuestra impotencia nos arrojáramos en sus brazos > providenciales): no estamos ante el Fin del Mundo, no ha empezado la > Tercera Guerra Mundial. Pero si no se detiene a "Hitler" esa burda > propaganda podría, a la larga, resultar cierta, como en el sindrome de la > profecía autocumplida. Y, claro está, no se detiene a "Hitler" con el > pensamiento. Ya hay quienes -probablemente como legítima defensa ante "el > horror, el horror" que invocaba el coronel Kurtz frente al corazón de las > tinieblas- se ilusionan con la emergencia de una nueva era de "ilustración > de la ilustración" que hiciera reflexionar a los amos del mundo sobre la > defectuosa distribución de la riqueza planetaria. O, por lo menos, que > indujera a la opinión pública norteamericana a presionar en esa dirección; > una proyección de deseos que por el momento choca contra la pared del > noventa por ciento de esa opinión pública que más bien presiona en la otra > dirección, la de la "guerra". Y de todos modos, como enseñó oportunamente > el profesor Marx, no se trata de un simple problema de distribución. Ya > hubo un famoso escritor norteamericano que propuso que la Fuerza Aérea, en > lugar de bombas, arrojara comida sobre Afganistán: ¿se puede ser tan > imbécil de no ver que la lógica del modelo de acumulación mundial no > permite que Bush -no más que, digamos, Cavallo- haga nada demasiado > diferente, y que no va a ser alterada por actos de caridad masiva? > Así que no, con sólo pensar no evitaremos nada. Y sin embargo, > seamos modestamente Innombrables: hay que seguir pensando. > > 4.- > Tampoco se trata simplemente de un acto criminal llevado a cabo por > psicóticos desaforados -sean los perpetradores del atentado o los señores > de la (nueva) "guerra"-. Aunque sea muy difícil de desentrañar, detrás del > llamado a la "guerra" hay una complicada trama política y económica que > mucho tiene que ver con la recesión mundial, al borde de la crisis > "depresiva", de un capitalismo en problemas que necesita una urgente > inyección reactivadora (¿y cuántas veces en el pasado se apostó a que la > guerra cumpla ese rol?). O, al menos, con el hecho de contar con una > excelente explicación de que la recesión continúe, o se profundice, como ya > se anuncia, bajo el increíblemente cínico argumento de que, gracias a las > consecuencias económicas y financieras del atentado , el próximo año > morirán de hambre varios miles de niños -cosa que antes, se sabe, no > sucedía-. Como si -lo señaló un premio Nóbel, para escándalo de muchos- un > minuto , y no un año, después del atentado, mientras caía la gente de los > edificios, los celulares de los agentes de bolsa no hubieran seguido > funcionando al rojo vivo, ordenando la compraventa de acciones de las > empresas aéreas o las compañías de seguros -hay toda una discusión > semántica implicada en esta rueda financiera: los edificios estaban > asegurados contra un atentado terrorista , pero no contra una guerra : ¿se > entiende?-. O con la escasez de petróleo (que sería solucionada mediante la > instalación de un gobierno afgano títere que permitiera su extracción por > parte de la compañía cuyo principal accionista es George Bush senior ), o > lo que sea. También, desde el punto de vista político, con la recuperación > de legitimidad para el gobierno posiblemente más ilegítimo de la historia > de los EEUU -es significativa la casi unánime disposición de los medios a > no mencionar más el tema de las fraudulentas elecciones de "banana > republic" de las que salió Bush-. O, más trascendentalmente, la progresiva > multiplicación de resistencias multitudinarias a la hegemonía del Imperio > (desde los zapatistas a los piqueteros locales, pasando por los Sin Tierra > o los movimientos antiglobalización en el propio centro imperial, que no > tienen nada que ver con ningún "terrorismo", pero que muy bien podrían > quedar comprendidos en la cada vez más laxa definición de ese concepto). > > El futuro inmediato, en este sentido, es bastante poco alentador: > entre otros males, lo que ha hecho el atentado es alentar el retorno con > más fuerza que nunca del Gendarme Mundial, de una suerte de Doctrina de la > Seguridad Internacional que hoy empieza por Kabul (con su posible extensión > a Irak, Sudán, etcétera), pero mañana llegará -ya está llegando- a > Colombia, o a nuestra llamada "triple frontera", y en donde el discurso > único que reduce la política mundial a la lógica guerrera del "amigo / > enemigo" puede instalar un régimen de Terror tan "globalizado" como el de > la economía, que ya es suficientemente terrorífico. O, cuando menos, una > profunda militarización y fascistización de la política internacional como > la que mencionábamos antes. Los argentinos -y muchos otros países de la > periferia, claro está- conocemos bien el problema: ¿acaso hace 25 años no > hizo falta implantar un régimen de terror para vencer las resistencias > iniciales al "nuevo orden económico" que empezaba a perfilarse? Ahora ese > orden está mundializado, y en crisis: ¿por qué no podemos sospechar que lo > que se hizo antes región por región para implantarlo se hará ahora al > nivel global correspondiente para mantenerlo , utilizando como pretexto > este acto deplorable? > Insistamos: todo esto, aunque muy complejo, puede todavía ser > analizado con los instrumentos teóricos que poseemos: renunciar a ellos > sería entregarnos a otra forma del terror, el de la irracionalidad > resignada. Ahora bien: dicho esto, es cierto que esos instrumentos, con > ser necesarios, no son suficientes. Los sociólogos, los politólogos, los > economistas, incluso muchos filósofos, han estado cuidando demasiado > celosamente sus quintitas, lustrando con demasiado ahinco las verjas de sus > jardincitos cerrados. Es urgente abrir más la cabeza, además del corazón. > Aparte de que es un compromiso irrenunciable de los intelectuales ponerse a > crear todo un nuevo instrumental crítico para pensar este "desierto de lo > real" en que hemos sido arrojados, quizá también haga falta (en verdad, > hace rato que algunos venimos diciendo esto, lo cual no es ningún mérito > especial) empezar a mirar en otras direcciones, menos "institucionalizadas" > o académicas, menos "normalizadas" e incluso "pasadas de moda" en el > mercado universitario. Por ejemplo (pienso en voz alta): la antropología de > las religiones, al menos en sus versiones más heterodoxas, que de Mircea > Eliade a Bataille, de René Girard a Ernesto de Martino, explican la mutua > implicación entre la violencia y lo "sagrado", o el papel del ritual de > sacrificio en las sociedades que sienten que su propio "ser en el mundo" > está en peligro, y que se impone un acto de "refundación ontológica", antes > de que sea demasiado tarde. O, en la misma línea, mirar hacia las teorías > filosófico-literarias de la Tragedia, que ubican ese género estético en > toda su significación política de conflicto entre el Caos y el Cosmos, > cuando lo que está en juego es la propia recreación de la polis . O hacia > un filósofo clásico pero "ninguneado" como Spinoza, o, más cerca nuestro en > el tiempo, un Merleau-Ponty: son muy diferentes entre sí, pero ambos > comparten esa preocupación por la densidad corporal de lo subjetivo. Y > habría que releer a una nueva luz el pesimismo antropológico del Freud de > Totem y Tabú o del Malestar en la Cultura . Y leer a los teóricos > postcoloniales, en especial los que se ocupan del Islam, y por supuesto > estudiar la historia de la cultura y la religión islámica -es increíble lo > poco que sabemos de eso nosotros, para no hablar de los norteamericanos, > que, con su habitual soberbia, ignoran supinamente lo que tienen enfrente, > o construyen esas imágenes abstractas "orientalistas", como diría Said-: > pensar, por ejemplo, qué significa, en términos de identidad cultural, que > sociedades tan diversas entre sí como lo son las islámicas hablen la misma > lengua (una comparación con Latinoamérica sería aquí muy provechosa), > versus la babélica dispersión de lo que se llama "occidente", o qué > significa que lo político sea un "reino de otro mundo" frente al cual la > propia muerte -no digamos ya la de los otros- carezca totalmente de > importancia. Esto es todo un capítulo aparte, al menos por dos razones: a) > la "laicización" o el "desencantamiento" antirreligioso del mundo parece > ser otra de las cosas que se acabaron: sólo que, como insinuábamos más > arriba, el reencantamiento religioso, subordinado al "imperio" de la > racionalidad instrumental, sólo puede prometer lo peor; el "fin de la > postmodernidad" no es un retorno a la modernidad, ni siquiera a sus > aspectos que tanto hemos cuestionado (y que quizá ahora añoraremos), como > la famosa "destotalización" de la experiencia en esferas autónomas que > analizaba Weber: al contrario, la nueva totalización que ya se puede > adivinar como horizonte teológico-tecnocrático es bastante siniestra; b) > como queda dicho, es inaudito lo poco que sabemos del Islam -sólo > comparable a lo mucho que ignoramos de, por ejemplo, ese caldero múltiple > que irresponsablemente llamamos "Africa"-: es sintomático que, en los tres > gruesos y extraordinarios volúmenes de Max Weber sobre sociología de la > religión, no lleguen siquiera a dos páginas , y ellas completamente > circunstanciales, las referencias a uno de los tres grandes monoteísmos de > la historia (ninguno de los cuales, digamos de paso, se originó en el lado > ahora dominante del mundo: "occidente" no ha creado ninguna religión > civilizatoria, y eso hace difícil no tentarse con el canónico "retorno de > lo reprimido"). Quiero decir: hay un síntoma monstruoso en esa renegación, > por parte del pensamiento "occidental", de una cultura sin la cual quizá > "occidente" (sin ninguna duda nuestra madre patria) ni siquiera existiría. > ¿Es esa renegación -más que una auténtica, disculpable, ignorancia- lo que > ha facilitado tanto el proyectivo y fantasmático "orientalismo" criticado > por Said? En todo caso, la operación es tanto más extraordinaria > por lo fácilmente desarticulable: en efecto, aún leyendo un superficial > manual histórico podríamos tal vez aprender que no hay ninguna implicación > o identificación "natural" entre el Islam y el fundamentalismo, ni siquiera > en los más conservadores "sunnitas" versus los más liberales "chiitas". O > que en la tradición islámica, que por cierto no concibe la separación entre > lo político y lo religioso, no hay sin embargo subordinación de lo primero > a lo segundo -lo que sería una condición sine qua non de lo que se llama > "fundamentalismo"-, sino más bien al revés. Al contrario, es la larga > historia "premoderna" de occidente la que registra esa tradición: no fueron > los islámicos los que inventaron la Inquisición, ni el concepto de > "Cruzada", ni las noches de San Bartolomé. O aprenderíamos, entonces, que > el fundamentalismo islámico -que por supuesto existe, aunque sea > numéricamente minoritario como porcentaje del total de los creyentes- es un > "invento" relativamente reciente, renacido con la erección del Estado > israelí y el desplazamiento de los palestinos, y agudizado con el fracaso > de las revoluciones anticoloniales como la de Argelia, o con el verdadero > genocidio que para la inmensa mayoría del Islam significó la > "globalización". ¿Hay que de nuevo decir que todo eso no lo justifica? ¿Que > lo que lo hace explicable no lo hace deseable, aún cuando no recurriera al > terror? Por supuesto: ninguna de nosotros -no digamos ya "nosotras"- > querría vivir bajo un régiman talibán. Pero Islam no es Talibán. > Y, ya que estamos, habría que estudiar con atención la historia > de las Cruzadas, ya que ese es el discurso (retórico, sí, pero ¿quién dijo > que las palabras no tienen efectos materiales?) con que ambos bandos están > manejando la cuestión -aunque, hay que decir la verdad: la palabra > "cruzada", y la pretensión de que Dios está de un solo lado, sólo la > expresó, hasta ahora, Bush-. Y, por otra parte, habría que reencontrarse, a > una nueva luz, con una antigua y hoy desprestigiada disciplina como era la > llamada Historia de las Civilizaciones (no tan antigua ni tan > desprestigiada, después de todo: es curioso que muchos que citan > elogiosamente las teorías del "sistema-mundo" de Wallerstein o Samir Amin > pasen por alto cuántas veces esos autores y otros de la misma escuela citan > a su vez elogiosamente no sólo a Braudel, sino a... Toynbee), y habría que > hacerlo a través y más allá de Huntington y su "choque de civilizaciones". > Lo de Huntington es en muy buena medida (pero no completamente ) > insostenible. Aún descontando la comprensible desconfianza que puede > despertar su rol de asesor del Departamento de Estado norteamericano, es > insostenible su sospechoso afán por "culturalizar" los conflictos, > desplazando lo que antes se llamaba su "base material", lo cual, como > ocurre siempre con los autoasumidos ideólogos, lo hace decir verdades a > medias: por ejemplo, que occidente no ha logrado, finalmente, > "occidentalizar" a las otras culturas; lo cual es parcialmente cierto, pero > sólo si se abstrae de la categoría de "cultura" aquélla "base" material > (económica, sí señor), que precisamente ha "occidentalizado" al mundo de la > peor manera -profundizando a abismos inéditos la desigualdad económica y > social-, y siendo por lo tanto responsable en última instancia de las > reacciones "culturales", incluídas las más perversas, contra la > occidentalización. Omisiones que demuestran que en esa "interna" de la > derecha -la idea del choque civilizatorio surgió en polémica con la del > "fin de la historia" de Fukuyama- están todos del mismo lado, si bien sería > necio negar la abismal diferencia intelectual entre el palurdo Fukuyama y > Huntington. Es insostenible asimismo la insólita propuesta, necesaria para > aquélla "culturalización" del conflicto, de que -puesto que la > modernización ha reducido la brecha mundial entre pobres y ricos- hay que > desestimar ninguna causalidad de los conflictos basada en las diferencias > económicas (propuesta irrisoria, si no fuera trágica, en un momento en que > la nación más rica de la tierra se dispone a aniquilar a mansalva a una de > las más pobres). Pero no todo es completamente insostenible, al menos como > sugerencia que habría que reinscribir en otra lógica: quizá la progresiva > idiotización de los "estudios culturales" nos haya hecho sobreactuar > nuestra resistencia a la importancia -fundamental , si se nos permite- de > la Cultura como "variable independiente", para decirlo con la fea jerga de > los metodólogos. > Otra mirada de interés podría dirigirse a la arquitectura de la > ciudad y/o a la etnografía urbana. Las jocosas sandeces pergeniadas por > Umberto Eco -a propósito de que después del atentado dejarán de construirse > rascacielos, y las ciudades se volverán todas ellas "horizontales"- no > dejan de convocar alguna sonoridad más profunda que la de ese eco > epidérmico: no es sólo que por obvias razones la vida cotidiana en la > capital del Imperio se verá radicalmente alterada (entre nosotros, se vio > radicalmente alterada en el barrio de Once, aunque ningún antropólogo o > sociólogo urbano le ha dedicado, que sepamos, el estudio que se merece), > sino que es la imagen de la Ciudad como símbolo moderno de la Civilización > en tanto tal, y la prospectiva de un retorno a una ruralidad protegida > (¿una refeudalización tecnocrática ?), la que deberá empezar a replantearse > seriamente. > > 5.- > En fin, la tarea es infinita, pero hay que hacerla (está de más aclarar que > no estamos proponiendo un programa de estudios de postgrado; aunque, dado > el estupor de nuestras actuales ciencias sociales, quién sabe si no sería > una manera de relanzarlas hacia algún intento de reconstrucción de sus > "grandes relatos"): es una defensa contra el pánico en el que ambos bandos > quieren hacernos caer. Y, sobre todo, hay que hacerla desde acá , desde > esta porción del mundo que nos ha tocado: pensar dónde y cómo quedamos > parados, o tirados, en medio de todo esto. Ya se escucha retumbar en > nuestras pampas, por ejemplo, el tambor batiente de la Seguridad Interior, > como si Buenos Aires fuera Nueva York; quiero decir: como si un gobierno > absolutamente incapaz -en el caso de que tuviera la voluntad- de garantizar > esas "seguridades" elementales que son la comida, la vivienda, la salud y > la educación tuviera la más mínima autoridad moral para gastar dinero en lo > que, ya lo sabemos, no será más que un modo de "asegurar" a los amos del > país que la cosa va a seguir igual, o peor. Para no hablar de la ilusión > estúpida de que un alineamiento automático -bajo el TIAR o cualquier otra > deshilachada etiqueta- nos dejará mejor protegidos; o peor, con un cinismo > infame, que nos beneficiará con nuevos fondos del FMI para financiar los > ajustes. Tampoco esa modesta parte de "Hitler" la vamos a detener pensando > en la antropología de las religiones, en la historia de las civilizaciones, > o renovando, aunque fuera muy radicalmente, nuestras teorías políticas. > Pero mucho menos dejándole el pensamiento al enemigo, que no cesará de > producirlo. Ni tan sólo firmando solicitadas que llamen a la ONU a > garantizar una paz mundial que en este mundo no depende de la pura fuerza > de voluntad. de los que lo hicieron a su voluntad. La "gravedad de la > hora", como se suele decir solemnemente, impone similar solemnidad a la > formulación epigramática: es preciso reconstruir un verdadero "gran > relato" que de cuenta de toda la complejidad de los conflictos actuales, y > sobre todo que permita activar esa "potencia de la multitud" de la que > también hablaba Spinoza: sólo el protagonismo democrático de las grandes > masas oprimidas puede eliminar las condiciones de posibilidad para los > terrorismos. Quizá todo esto presente la oportunidad, ante el vacío de > sentido con el que mucha gente percibe el mundo de hoy, de una refundación > verdaderamente radical de la polis humana, del ser mismo de lo social. > Pero eso no lo van a hacer los amos y beneficiarios del mundo, ni los > tirabombas indiscriminadores. Vale la pena terminar con una frase de Sartre > que me encuentro citando cada vez con mayor frecuencia: "No es tanto > cuestión de lo que la historia nos ha hecho, sino de qué vamos a hacer > ahora nosotros con eso que nos ha hecho". By Adrian Dannatt Artist Michael Richard killed Few people were even aware that there were artists’ studios in the World Trade Center. For the last few years the Lower Manhattan Cultural Council had rented out floors to artists a few months at a time. There was always the occasional empty space in the towers because they were normally leased for 10 years at a time rather then piecemeal. Visiting these artists involved elaborate arrangements, requiring ID and other proof to satisfy the tight security. Among those who occupied space was Michael Richards, a young installation artist from Miami. He was based up on 92nd floor in Tower One and would often stay overnight rather than try and return to his place out in Queens. The night before the attack Richards was working late in his studio and was up the next morning to carry on working on his sculpture when the plane struck directly on his floor at 8.45 am. So far, he is the only artist known to have been killed. Also based in the tower was Peter Fend, an artist whose work is all about global politics, geographic borders and intelligence surveillance. His company “Ocean earth” produces map sculptures that are the result of months of information analysis and satellite observation patterns. Fend was in Britain at the time of the attack, preparing his show “Sea change” at Spacex Gallery in Exeter © arteUna - Todos los derechos reservados. Registro a la propiedad intelectual N.706.777 |